Hoy reflexiono sobre los libros de recetas para padres. La falta de tiempo y la necesidad de sentirnos buenas madres nos llevan a buscar el libro manual que todo lo resuelva. ¿Existe? ¿Es esa la solución? Hablamos de lo que sí hace falta para sentirnos buenas madres y disfrutar de nuestra maternidad. Por cierto ¿Eres de las que se siente una madre molona porque no te da la vida? Te cuento mi experiencia…
Suscríbete al podcast aquí: Itunes || Ivoox
Índice de contenidos
¿Una mamá molona?
En este episodio escucharéis una voz que no parece mía. Estoy completamente afónica. Básicamente tengo la voz rota. Aún así agradecida de haber podido grabar, ayer no salía nada de mi garganta. 18 pastillas contra la afonía después, al menos he podido grabar el programa y contaros que soy una mamá que mola mucho porque «No me da la vida». Os cuento mi pequeña anécdota:
El otro día, cuando fui a recoger al pequeño Leo de su cole nuevo, una de las mamás llevaba puesta una camiseta con el lema «No me da la vida». Me hizo mucha gracia y hasta me dieron ganas de buscar una igual para poder lucirla yo también. Más tarde, reflexionando sobre ello, me he dado cuenta de que a las mujeres en el fondo nos mola eso de que no nos dé la vida. Cuanto menos tiempo tengamos y más ocupadas nos sintamos parece que nos creamos «mejores», más justificadas o más «realizadas». ¿Te ocurre a ti también? ¿Cómo puede ser?
Me he dado cuenta, muy a mi pesar, de que soy el mejor ejemplo de ello. Hace dos semanas, antes de empezar a impartir estas clases de dibujo que me han dejado afónica, antes siquiera de saber que iba a comenzar con ellas, también solía decir eso de «No me da la vida» y todos a mi alrededor lo corroboraban. Ahora, 15 días después y 20 horas de trabajo más a la semana, añadidas a otra colaboración, una empresa, el peque y la casa, parece que me sienta orgullosa de poder decirlo todavía más alto cuando la realidad es que la cuerda está a punto de romperse.

He estado muy cerca de no llegar al final de la semana. Lograrlo ha supuesto jornadas maratonianas de trabajo, dormir de 4 a 6 horas y hacer equilibrios malabares para conciliar. Si es que a esto se le puede llamar conciliar. ¿Hasta qué nivel de «No me da la vida» podemos llegar? ¿Te lo has planteado alguna vez? ¿Por qué lo hacemos? O por qué lo hago, aunque me gustaría pensar que no soy la única que cae en esto. Como dicen «Mal de muchos consuelo de tontos».
Al menos en mi caso no puedo seguir mucho tiempo así. Pero qué hacer cuando la economía manda y no estás dispuesta a renunciar a tu maternidad ni tampoco dejar de perseguir un sueño que viste nacer y que ahora ves crecer cada día. Yo no sé muy bien cuál puede ser la solución. ¿Alguien por ahí que tenga la fórmula mágica?
Intuición natural de madre
Vale, lo reconozco, me estoy aprovechando un poco de vosotras para desahogarme, pero no me estoy yendo del todo por las ramas. Todo esto viene a raíz del mensaje que quiero transmitiros. Una reflexión que surge tras nuestra última entrevista a la directora de la escuela Waldorf en Valladolid, «El puente Azul». Dejadme que os lea un fragmento de lo que nos decía Thurit en aquella entrevista hacia el minuto 40 y luego seguimos hablando:
Vivimos en una sociedad con exceso de información pero a veces no llegamos a la comunicación esencial. La comunicación más esencial no pasa por leer de todo porque eso a veces genera mucha frustración. Creo que como madres generadoras de vida también tenemos que conectar con esa esencia nuestra, con ese instinto y dejarnos, por lo menos de vez en cuando, auto guiar acompañándolo luego, más que de lecturas solitarias, de encuentros donde haya una comunicación de calidad.
Me he encontrado con madres que han leído mucho pero que, sin embargo, se sienten mal de toda la información que tienen porque piensan que lo están haciendo todo al revés. A todo se va llegando pero es mejor llegar a modo de pequeñas conquistas y para ello la intuición y la observación son herramientas muy poderosas. A través de observar a nuestros hijos y auto observarnos a nosotros podemos aprender muchas cosas.
Las 3 claves de una maternidad consciente
Como veis, Thurit habla de algo con lo que estoy muy de acuerdo: dejarnos llevar por la intuición en lugar de acumular y acumular información del exterior. En definitiva, lo que me gustaría reivindicar hoy, es una maternidad más consciente a través de tres puntos: la propia intuición que como mujeres y madres llevamos dentro, la observación pausada de nuestros hijos, y la información de calidad para completar la que nos pueda faltar a través de encuentros con otras madres afines a nuestros principios.
Antes esos «encuentros con comunicación de calidad» no teníamos que buscarlos. Se encontraban de manera natural a nuestro alrededor en forma de vecinas cercanas, madres en casa, hermanas, cuñadas, o amigas con las que hablábamos a diario en formato presencial y no a modo de audio vía whatsapp o comentario de Facebook. Hoy lo que hacemos es convertirnos en mamás blogueras o podcasters para desahogarnos y gritar nuestras dudas y angustias de madres primerizas.
En aquellos tiempos en los que el reloj no corría tan deprisa podíamos pararnos a saludar a nuestra vecina o incluso tomarnos un café con ella para compartir experiencias, pedir consejo o incluso ayuda. Además, teníamos tiempo para esa auto observación, para contemplar tranquilos a nuestros hijos, para analizar, para ir aprendiendo del error, y para dejarnos guiar por la intuición que brotaba de manera espontánea.
La realidad hoy es que como «No nos da la vida», como no tenemos tiempo para nada, tampoco lo tenemos para observar con calma a nuestros hijos y usar lo que la naturaleza nos ha dado de forma natural. Seguimos nuestro ritmo frenético y nos angustiamos con cada lloro, con cada pataleta o con cada noche en blanco del bebé. La cuestión es si aceptar esa ‘realidad’ que tomamos como inamovible y agachar la cabeza o intentar cambiarla.
Manual para padres primerizos
Ante esta situación lo que tratamos de hacer normalmente es buscar a toda costa el manual perfecto para padres que todo lo resuelva. Ese libro o esa web que solucione, de manera lo más condensada y concreta posible, todos los problemas con los que nos vamos a encontrar como madres. Lo devoramos deprisa y actuamos sin pensar si eso es realmente lo que debemos hacer o es la maternidad que queremos para nuestros hijos. A veces ni siquiera nos hemos parado a pensar antes en la maternidad que nos gustaría.
Desde luego no trato de abolir los libros sobre maternidad, paternidad o crianza. Hay buenísimos libros que nos pueden servir de guía y seguro que trataremos alguno de ellos aquí o entrevistaremos a alguna de sus autoras. Sin embargo, creo que es un error tratar de teorizar la maternidad. Como siempre digo existen tantas maternidades como mujeres, tantas como hijos, y no hay ningún recetario capaz de darnos la clave.
¿No te ha ocurrido nunca que ese consejo que te da tu cuñada convencida de su eficacia a ti no te ha servido con tu hijo? A mi me ha pasado muchas veces, incluso con «recetas» venidas de nuestra propia pediatra.
Creo que antes de leer nada sería mejor pararnos y reflexionar sobre la maternidad que nos gustaría para nuestros hijos y ponerla a prueba con cada uno de ellos. Después sí, después un buen libro, o mejor aún, un encuentro con otras madres afines a nosotras pueden ser de gran ayuda. Al fin y al cabo somos seres sociales y sobre todo en esos primeros momentos de madre en los que tantas veces ten sientes sola y angustiada, saber que puedes contárselo a alguien es un gran consuelo y un apoyo de mucho valor.

Grupos de apoyo a la maternidad
Seguro que cerca tienes a alguien: amigas, tu madre, etc. Pero en esos primeros momentos de madre, al menos a mi, me daba por pensar que era una niña tonta que no paraba de quejarse, aún me pasa. Millones y millones de mujeres desde el principio de los tiempos habían sacado adelante a sus hijos con muchos menos recursos y formación que la mía. ¿No iba a ser yo capaz ahora de hacerlo? En esos momentos no quería contarle mis angustias a nadie cercano, ¿qué iban a decir? Quizá en aquellos meses hubiera estado muy bien contar con uno de estos grupos de maternidad ajenos a mi entorno inmediato que tan de moda se están poniendo en países como Australia o Estados Unidos. Lugares para buscar encuentros de calidad como nos decía Thurit en el episodio 15.
A raíz de esto me acordé de la serie The Let Down ¿La conocéis? Es una serie australiana que trata de dar una visión más real de la maternidad con gran dosis de humor negro y también algo de amargura. La serie se desarrolla en torno a uno de estos grupos de encuentro de madres que, acompañadas de una psicóloga, tratan de contar sus experiencias y sobrellevar su nueva situación.
Os lo quería contar porque voy a tratar de bucear en las redes para encontrar también por aquí esos grupos de maternidad. No son tan habituales como en otros países pero seguro que existen. A partir de ahí os contaré como funcionan, dónde podéis encontrarlos o cómo podríais formar vuestro propio grupo de encuentro para madres. ¿Os gustaría? Como os decía, a mi me hubiera gustado contar con alguno cuando me convertí en madre así que espero que esta información os pueda ayudar.
Antes de eso os cuento una cosilla por si todavía no la conocéis y os apetece apuntaros. Como sabeis en cleOveo perseguimos un ideal: diseñar la mejor ropa para bebés: ecológica, cómoda y saludable como ninguna; prendas que faciliten también nuestra maternidad en el momento en el que más lo necesitamos; y con diseños únicos. Moda infantil hecha para madres que no se conforman, para la maternidad del siglo XXI. Lo mejor para él, lo mejor para ti y lo mejor para el planeta. Nada menos.
Así nació nuestro mono reversible cleOveo y ahora estamos a punto de lanzar una nueva colección en la que nos encantaría que participaseis. ¿Te apuntas? Solo tienes que suscribirte a nuestra newsletter sin ningún compromiso. Hazlo ahora y descubrirás todos los beneficios de nuestro innovador mono, conocerás a las personas y la historia que lo están haciendo posible, podrás elegir el estampado de la nueva colección, tenerlo antes que nadie con un 40% de descuento y además personalizado solo para ti. ¡Apúntate!
Por lo demás, como siempre, deciros que nos propongáis cualquier tema que os interese para nuestro próximo episodio de Una Guardería Para Leo, o que compartáis con nosotros vuestra experiencia. ¡Espero todos vuestros comentarios aquí abajo! y si preferís escribirme de manera privada o más personal sabéis que podéis hacerlo escribiendo a contacto@cleoveo.es. Estaré encantada de recibir vuestros emails y os responderé seguro.
Muchas gracias por estar ahí, un fuerte abrazo y nos vemos en el próximo episodio, si tu quieres, claro : )
Interacciones del lector